Liliana Tamayo es una emprendedora nacida en el municipio de Envigado que nunca pensó que su pasión y sustento de vida sería un negocio de empanadas.
En el año de 2006 trabajaba como secretaria en una empresa de acabados de la Av. Oriental, en Medellín, pero esta quebró, tuvo que cerrar sus puertas del todo y se quedó sin trabajo.
Por muchos meses estuvo pensando qué podía hacer para continuar generando ingresos, ayudar a su esposo, Héctor Sánchez, con los gastos del hogar y mantener a sus tres hijos.
En ese entonces en su familia era una costumbre que ella preparara las tradicionales empanadas de iglesia en las fechas especiales o en las reuniones que todos hacían, así que como “idea” comenzó a venderlas y así fue como empezó su negocio.
Así como estas eran las preferidas para sus familiares, se empezaron a convertir también en las preferidas de todos sus vecinos y demás clientes que llegaban de todos los barrios de la Ciudad Señorial y del Valle de Aburrá, pues el voz a voz funcionó del todo.
Don Héctor ha sido su fiel compañero y apoyo, siempre ha estado a su lado siguiéndole los caprichos en sus inventos. Hablo de inventos porque esta mujer decidió crear unas empanadas únicas, que se caracterizan de las demás, sobretodo en este municipio en el que se pueden encontrar empanadas en cada esquina.
Comenzó creando la llamada “empanada envigadeña”, que se compone de masa de maíz y un relleno de morcilla, sí, morcilla. En vez de echar el arroz en la tripa, esta mujer envuelve el relleno en masa de empanadas, y por eso es tan famosa.
Solo a ella se le pudo ocurrir la idea de meter en una empanada un ajiaco (relleno de pollo, papa, maíz y guasca), una bandeja paisa (relleno de fríjol y chicharrón) o una morcilla, y la verdad, solo ella pudo lograr que este invento fuera tan famoso y apetecido tanto nacional como internacionalmente, pues le han ofrecido irse a cocinar a otros países, pero ella dice que siempre será fiel a su negocio y a su gente.
Crecimiento y reconocimiento de Lili Ricuras
Para el año de 2010 su punto de venta ya era reconocido en todo el municipio y sus empanadas apetecidas por todo el mundo.
Decidió incluir más productos en su carta y aparte de sus tres artículos estrella comenzó a vender también pasteles de pollo, de carne, pasteles dúo y arepa tostada con morcilla acompañada de limón.
Lili explica que tal vez el secreto de sus particulares preparaciones es la forma como las hace, pues la masa es la misma, pero para cada producto tiene utensilios de cocina diferentes y hasta el ají y el guacamole que ofrece para que los clientes acompañen sus empanadas es hecho en casa.
Horarios de su negocio
Lili Ricuras está ubicado en la calle 46E sur # 42ª-11, barrio La Paz, es un puesto de comida con una carpa que ella puso afuera de su casa, para más comodidad.
Ella y su esposo, ya con más de 10 años de haber emprendido, cuentan con 6 personas más que trabajan junto a ellos de miércoles a domingo desde las 3:00 p. m. hasta las 10:00 p. m.
En estos cinco días el lugar se llena de comensales que llegan de todas partes del Valle de Aburrá, y hasta de otros países, solo con el fin de satisfacer el antojo de las famosas empanadas de morcilla, ajiaco y fríjol o también de probar las demás ricuras que ella prepara.
