Sobresalir en el mundo del deporte y ser reconocido por lo que se hace requiere de esfuerzo y disciplina, las constantes prácticas y entrenamientos son cruciales para mejorar las habilidades y el rendimiento deportivo.
Esto lo tiene muy claro Ginna Escobar Betancur, una gimnasta envigadeña de 26 años de edad que desde los 4 años ha estado ligada al mundo del deporte. Ella dio sus primeros pasos en natación, sin embargo, cuando la iban a mandar a competir a ligas, se dio cuenta que no era lo suyo y dejó de practicar aquella disciplina.
Abierta a la posibilidad de otras opciones, Ginna vio a una persona practicando gimnasia artística y le llamó mucho la atención. Comenzó a practicarlo y a los seis meses quedó campeona departamental.
Ingresó a la liga de Antioquia y comenzó el proceso para competir a nivel nacional y desde los 9 años fue parte de la Selección Colombia, inició a viajar a juegos suramericanos, a ganar medallas y a ser campeona en muchas competencias en las que participaba.
La joven deportista ha sido campeona suramericana, medallista panamericana, centroamericana y ha ido a seis campeonatos mundiales. Además, obtuvo el cupo para que Colombia fuera a los Juegos Olímpicos de Río de Janeiro 2016.
Ginna tiene claro que ningún deportista está exento de una lesión, de hecho, considera que este es uno de los obstáculos más grande que se puede vivir.
“Las lesiones siempre van a estar y es lo que tienes al ser parte de la alta competencia. Además, de la mano de esto está el tema de la presión, de manejar los miedos de volver a empezar después de una lesión fuerte. Lo físico y lo mental van unidos de la mano”, expresa Ginna.
Para ella su principal apoyo es su familia, en especial su mamá, quien ha estado en todo momento desde el día uno.
Ser deportista no ha sido el único reto que ha tenido que enfrentar, pues, además, es psicóloga de la Universidad de Envigado, ya ha ejercido su profesión con deportistas menores de disciplinas como badminton, tenis de campo y tiro con arco. Sin embargo, no es algo que haya seguido haciendo de forma regular porque no le queda mucho tiempo. “Es un poquito complicado el llevar procesos de mis pacientes porque me entrego mucho a cada cosa que hago, entonces tiende a ser un poco desgastante”, manifiesta la joven.
Lograr estudiar su carrera profesional no fue nada fácil, expresa que sus rutinas diarias eran pesadas porque entrenaba en la mañana, en la tarde y estudiaba en las noches.
Para este año tiene muchos objetivos, uno de ellos es clasificar a los Juegos Olímpicos de París 2024, y para ello debe competir en unas copas del mundo que comienzan desde mediados de febrero. También tiene planeado realizar una especialización en psicología deportiva.
Su mensaje para los niños que sueñan con ser deportistas es que “el deporte que elijan lo hagan con mucha pasión y mucho amor, que, por encima de cualquier cosa, de viajes, dinero o experiencia, está el amor con el que se hacen las cosas. Los momentos difíciles se van a presentar, pero si sientes amor y pasión por lo que haces, las adversidades van a ser más fáciles de superar.