Uno de los referentes más grandes de arte, historia y cultura que tiene el municipio de Envigado es la pintora y artista Débora Arango Pérez, una mujer que se caracterizaba por tener un espíritu libre, enérgico y femenino.
Carlos Gaviria, historiador y actual coordinador de la Casa Museo Débora Arango, cuenta que el propósito de esta inteligente mujer estaba basado principalmente en generar un cambio real en la sociedad, sin tener que imponer sus ideas como una camisa de fuerza.
En el año de 1955 Débora vivía en el municipio de Envigado, así que sus ideas de cambio como defensora de los derechos civiles de la mujer, sus argumentos en contra de los roles y papeles que ya estaban preestablecidos para el género femenino en la sociedad, se vieron reflejados principalmente en la ciudad Señorial de Antioquia, dando cuenta con sus argumentos de la gran desigualdad que existía.
Gaviria afirma que esta mujer participó exhibiendo sus obras en gran variedad de eventos culturales realizados en el municipio, con lo que logró que fuera mucho más reconocida, que la gente le tuviera más cariño y que se convirtiera en un referente de fuerza y cambio, sobre todo para las mujeres.
Queriendo continuar con su vocación, Débora asistió a una clase de pintura que era solo para hombres y fue rechazada por el profesor que sarcásticamente le dijo que le faltaban pantalones para poder entrar al salón. Días después, con sus aprendizajes de costura, decidió organizar unos jeans de su padre, y volvió a la clase en la que no había sido recibida por ser mujer, pero usando los jeans.
Carlos describe con felicidad esta anécdota importante que tuvo impacto en Envigado, pues según él, gracias a la decisión de esta mujer y al hecho de negarse a ser parte de los estándares de la época, las mujeres del municipio empezaron a usar estas prendas que eran consideradas solo para hombres.
Según el medio de información Semana, desde el año 2016 circula en el país el billete de 2.000 pesos con el rostro de la artista, con el fin de resaltar la verdadera revolución del arte nacional y darle un gran reconocimiento a una de las mujeres más importantes del siglo XX en Colombia.
La Escuela Superior Tecnológica de Artes ubicada en barrio Mesa, Envigado, también es otro de los legados que la pintora dejó al municipio. En el año 1994, esta institución que lleva su nombre, nació con la idea de elaborar una propuesta educativa que continuara con su línea artística y social, basada en permitir que cada una de las personas se expresara libremente.
El portal Biografías y Vidas, afirma que ella participó en diferentes exposiciones colectivas, realizadas en las ciudades de Cali y Medellín, donde exhibió sus óleos y acuarelas con algunos desnudos que resultaron escandalosos para la época. Su estilo de arte crudo y original fue catalogado como provocativo; el escándalo y rechazo fueron tan grandes que estuvo a punto de ser excomulgada ya que veían sus obras como algo “inmoral”.
Casa Museo Débora Arango
Continuando con el legado que esta artista dejó al municipio, se encuentra Casablanca, un lugar que anteriormente era su hogar y que se convirtió en un sitio abierto al público donde se puede descubrir la memoria artística y patrimonial de Débora Arango, representada en algunos inmuebles, mobiliario, zócalos, cerámicas intervenidas por ella y algunos otros elementos que se convirtieron en bienes públicos en el año de 2017.
En este lugar se ofrecen visitas guiadas a grupos de seis personas de lunes a viernes entre las 2:00 p. m. y las 5:00 p. m. Estas se realizan con previa inscripción llamando a los teléfonos 339 40 00 ext. 4079 – 4427.
