Los barrios son lugares que guardan historias, vivencias y momentos de quienes lo habitan. Se transforman en hogares que resguardan culturas, costumbres y personas que se convierten en familias por los años que comparten ideas, pensamientos y lazos difíciles de romper.
Uno de los sitios que guarda todas esas historias y vivencias, es el barrio Mesa Jaramillo, un espacio que a través de los años ha representado la cultura y esencia de Envigado, tanto así que en el lugar permanece el monumento a Cristo Rey, un símbolo de la formación religiosa de los habitantes del municipio y referente cultural y urbano del barrio.
De acuerdo con el Centro de Historia de Envigado, la creación de Mesa Jaramillo se remonta al año 1923, cuando fue impulsado por la casa comercial Heliodoro Medina y Cía, con el propósito de dar vivienda a sus empleados.
Este lugar que también es conocido como “El Paraíso de envigado”, según el Concejo Municipal, fue uno de los espacios más reconocidos por sus fábricas de bocadillos, arepas, costales y otras tiendas tradicionales de barrio.
Además, anteriormente existió una manzana llamada el barrio de los empleados por la cantidad de trabajadores que permanecía en el lugar.
El barrio fue bautizado como Mesa Jaramillo para honrar a don José María, un ilustre, creador y catedrático envigadeño, quien falleció cinco años antes del homenaje.
Mesa es un lugar que en la mañana de todos los viernes santos recibe a feligreses de Envigado para la solemne procesión del Vía Crucis.
Un barrio que, con iniciativas microempresariales como carpinterías, cafeterías, tiendas, etc, demuestra la pujanza con la que sus habitantes se ganan la vida.
