Posiblemente el chicharrón más famosos de Envigado y Antioquia es el de La Gloria de Gloria, un restaurante ubicado en el barrio Los Naranjos, justo en toda la esquina en donde se juntan las calles 36 y 37.
La historia del restaurante comenzó hace 32 años cuando a la señora Gloria Ramírez le dieron la oportunidad de trabajar en el lugar, ya que ella antes laboraba en un local más pequeño haciendo desayunos y almuerzos. Por ser una mujer tan berraca y echada para adelante un amigo le dijo que tenía un local más grande para que pudiera hacer mejor su trabajo.
Martha Mesa Ramírez, hija de Gloria y encargada de recibir con la tradicional copa de “guaro” a cientos de clientes que a diario visitan el lugar, expresa con lagrimas en los ojos que La Gloria de Gloria lo es todo para ella.
«Yo siento que el restaurante tiene vida y me conecto con él en gratitud porque en un momento económico difícil que pasamos nos dio todo, la unión familiar, el techo, la comida, todo”, dice Martha.
Cuando Gloria recién inició en el negocio, los platos eran más pequeños, con el tiempo el restaurante fue exigiendo más y la llevó a experimentar con chicharrones más grandes y a volverlos únicos en el lugar, lo cual dio buen resultado y hoy en día se realizan chicharrones hasta de 1 kilo que van acompañados de una bandeja que lleva frijoles verdes con pezuña, una entrada de morcilla con arepitas y una bebida que puede ser mazamorra, claro o guarapo.
Antes se realizaban muchos más platos, pero la bandeja empezó a coger fuerza y a desplazar los otros alimentos. “Al ver que no tenían rotación decidimos ponerle más interés al plato que lo exigía”, expresa Martha.
El alimento se ha hecho tan popular, que ni la famosa cantante dominicana Tokischa se resistió a visitarlos para probar el tan deseado chicharrón de 1 kilo. Así como ella, también han tenido la visita de personajes como Risa Loca, Lola Carola y Epa Colombia.
Para Martha, lo que los ha mantenido durante estos 32 años “ha sido el amor con el que hacemos las cosas y recibimos a los clientes, la buena calidad en los ingredientes y la constancia».
Ella tiene muy presente lo que significan los clientes para el lugar. «Siempre le doy gracias primero que todo a Dios, porque él es el que lo dispone todo, a él le oro y le doy gracias por las personas que trae y a esas personas que vienen, gratitud infinita porque gracias a ellos estamos nosotros”, expresa Martha.
Doña Gloria, atendía en el lugar hasta antes de pandemia. Sin embargo, se vio muy afectada con la situación, por lo cual, Martha y su hermano quedaron como encargados del restaurante.
El nombre del lugar se creó en el 2005 por un chef extranjero que los visitó y se disfrutó todos los platos, le encantaron y por eso le puso La Gloria de Gloria.
