
Luego de 48 días, las autoridades lograron la captura de los presuntos responsables del asesinato de la periodista María Victoria Correa Ramírez y su hermana Norelia Correa, ocurrido en una panadería del municipio de Envigado.
Los capturados fueron identificados como Juan Camilo Carvajal Burbano, alias Gafas, Deiby Yulián Posso Pretel, alias Cali y Yuván Daniel Arenas Gómez, alias El Mello. Según la investigación, los tres habrían planeado y ejecutado el ataque contra las hermanas Correa Ramírez.
Una investigación que unió a cinco grupos especializados
El caso fue liderado de forma conjunta por la Fiscalía General de la Nación y la Policía Nacional, a través de unidades del CTI y la Sijin, quienes integraron cinco grupos especializados para dar con el paradero de los responsables.
Tras varios días de análisis de cámaras de seguridad, seguimientos y cruces de información, los capturados fueron localizados en los municipios de Prado, Tolima y Cali, Valle del Cauca, donde fueron detenidos el 13 de mayo en operativos simultáneos.
Así se habría cometido el crimen
Según el relato de la fiscal encargada del caso, los implicados se habrían hecho pasar por domiciliarios para no levantar sospechas al ingresar al establecimiento donde se encontraban las tres hermanas.
Alias Cali habría ingresado primero al lugar, pero el arma se le atascó, por lo que no pudo ejecutar el ataque. Al salir, entró El Mello, quien portaba un arma de fuego calibre 9 mm. La fiscal aseguró que este hombre fue quien disparó directamente a la cabeza de María Victoria Correa, y luego contra Norelia Correa, impactándola en el rostro y también hirió a Bertha Lía Correa Ramírez, quien recibió un disparo en la clavícula, pero sobrevivió.
La huida y el seguimiento
Luego del crimen, los atacantes huyeron en motocicletas, una de ellas conducida por alias Gafas, recorrieron aproximadamente cinco cuadras y posteriormente abordaron un taxi que los llevó hacia el sur del área metropolitana del Valle de Aburrá. Después del atentado, los tres se habrían desplazado a sus lugares de origen, desde donde finalmente fueron localizados.
Aunque el material probatorio los vincula directamente con el crimen, ninguno de los capturados aceptó los cargos. Sin embargo, un juez de control de garantías ordenó medida de aseguramiento en centro carcelario, mientras avanza el proceso judicial.